jueves, 5 de octubre de 2017

La parroquia de San Félix de Valois acoge la presentación y el pregón del Domund

El pasado lunes, 2 de octubre, tuvo lugar la presentación del Domund (Jornada Mundial de la Propagación de la Fe), que se celebrará (Dm) el próximo domingo 22.
Durante el acto, que comenzaba a las 20 horas en el salón de actos de la parroquia de San Félix de Valois de Jaén, El Delegado Episcopal de Misiones y OMP, D. Manuel Alfonso Pérez Galán, presentó el lema de este año: «Sé valiente, la misión te espera».
“«Sé valiente». El papa Francisco invita continuamente a tener el valor de retomar la audacia del Evangelio. Coraje y valentía para salir de nosotros mismos, para resistir la tentación de la incredulidad, para gastarnos por los demás y por el Reino, para soñar con llegar al más apartado rincón de la Tierra. Es la hora de tener valor para tomar parte en la actividad misionera de la Iglesia”, explicó D. Manuel Alfonso.
“«La misión te espera». Hasta el último confín, sin límites ni fronteras. Todos estamos llamados a la misión. El anuncio del Evangelio se ha transformado en una necesidad del creyente: es como la respiración. La mayoría de los bautizados viven la misión en el lugar donde habitan, algunos son enviados por la Iglesia a otros ámbitos geográficos; pero todos sienten la necesidad de transformar su existencia en un compromiso misionero”.
A continuación, comenzaba el pregón. “Este año hemos celebrado el IV Pregón del Domund en nuestra Diócesis, que ha estado a cargo del M.I. Sr. Emilio Samaniego Guzmán, presbítero diocesano y capellán del Hospital Médico-quirúrgico Ciudad de Jaén”, indicó el Delegado.
“Con sus bellas y profundas palabras nos ha motivado para iniciar este octubre misionero que tiene su cénit en la Jornada Mundial de las Misiones, el Domund. Una jornada, un mes en el que todos nos sentimos un poco misioneros ad extra”.
Asimismo, el pregonero recordó a Santa Teresa de Lisieux, carmelita y patrona de las misiones porque en el corazón de la Iglesia quiso ser el amor; a San Francisco Javier, el gigante misionero en Asia, que bautizó incansablemente; y a San José de Vaz, misionero en Ceilán (ahora Sri Lanka) durante la ocupación holandesa, cuando el calvinismo era la religión oficial y tenía que evangelizar de manera clandestina.
“Este acto es el «pistoletazo de salida» para que el octubre misionero sea una oportunidad en que todos hagamos algo concreto por «las misiones» a lo largo de las cuatro semanas del mes: 1ª oración, 2ª sacrificio, 3ª limosna (coincidiendo con la Jornada) y 4ª oración por las vocaciones misioneras. La Misión nos espera a todos”, insistió Pérez Galán.
Manuel Alfonso Pérez Galán
Delegado Episcopal de Misiones y OMP

DOMINGO IV DE PASCUA