Retomamos el curso pastoral después del paréntesis
veraniego y lo hacemos con pleno convencimiento de que El Señor nos llama a la
evangelización por múltiples caminos. Este curso, también el plan pastoral
diocesano nos invita a poner el acento en el anuncio del evangelio,
especialmente a los que todavía no lo han acogido en su corazón.
Con ese empeño, renovada nuestra confianza en el
Señor, hemos comenzado este fin de semana un nuevo curso Alpha, en el que, en
un clima distendido y acogedor renovamos el anuncio del Evangelio de Jesucristo
y los fundamentos de la vida cristiana.
También acaban de comenzar un nuevo grupo de vida
cristiana, siguiendo las indicaciones de la vicaría de Evangelización. En estos
grupos, utilizando la metodología de la
acción Católica (ver-juzgar-actuar) los participantes intentan, no solo conocer
el evangelio, sino irlo integrando en su día a día. La vida cristiana no es
solo lo que ocurre el domingo en misa, sino las consecuencias que ese encuentro
con el Señor-Jesús tiene para toda nuestra existencia. La vida familiar,
laboral, social…
Estos grupos de vida irán surgiendo en la medida
que haya personas interesadas, por eso os animo a que no dejéis de comentar
conmigo vuestras inquietudes y vuestros deseos. Si hay quien desea caminar en
la vida de fe no faltarán quien los acompañe en este camino apasionante.
En el consejo pastoral se planteó también la
posibilidad de realizar una asamblea parroquial en el mes de noviembre,
coincidiendo con el día de la Iglesia diocesana y la semana de
corresponsabilidad en la parroquia que ya iniciamos el año pasado un poco
tímidamente y que este año pensamos repetir. Espero que entre todos seamos
capaces de llevarla a término.
Otro aspecto que no puede faltar en la vida de la
parroquia es la oración. Sin oración, las actividades que realicemos corren el
riesgo de convertirse en un juguete sin pilas, al que hay que empujar todo el
rato. Sólo Cristo tiene el poder de mover los corazones con su Espíritu.
Nosotros estamos llamados a ponernos a sus órdenes.
Además de la capilla abierta todo el día y de los
grupos que se dedican expresamente a la oración, como es la Adoración Nocturna,
yo tengo mucha ilusión en la adoración continua los primeros viernes de mes.
Iniciativa que ya comenzamos el curso pasado y que puede servir como el signo
parroquial de que queremos que toda la vida de nuestra parroquia brote de la
Eucaristía, celebrada y adorada.
Aunque las cosas materiales pueden tener menos
importancia, hemos aprovechado el verano para sustituir las ventanas de hierro
de las aulas de catequesis y de los salones parroquiales por ventanas más
eficientes. En este proceso hemos sido ayudados por una subvención de la Junta
de Andalucía con fondos de la unión europea. La subvención ha cubierto el 60%
del coste, pero aun así ha supuesto una inversión de más de 9000€ que nos han
prestado y que iremos devolviendo poco a poco.
Mucho más querría contaros en este comienzo de
curso, pero tiempo tendremos de
comunicarnos, utilizando también la última página de la hoja parroquial, donde
además de otras noticias de la Iglesia Diocesana y universal, iré contándoos
ilusiones, proyectos y actividades que vayan realizándose en la parroquia.
Un fuerte abrazo
Vuestro párroco